Nuestro mejor cliente

Una vez, un cliente propietario de un piso que tenía a la venta me dijo en una visita: “tienes que defender mis intereses porque te pago yo, YO SOY TU CLIENTE”. Efectivamente me pagaba él los honorarios en caso de formalizar la venta, ya que no le cobramos nada al comprador.
Esta frase tan contundente me hizo reflexionar:
¿A quién nos debemos: al comprador o al vendedor?
Es cierto que el propietario paga la factura de la agencia, pero ya está incluida en el precio de venta, lo que implica que la está pagando con el dinero del comprador. Los honorarios los paga el vendedor con el dinero del comprador.
Normalmente oscila entre un 3% y un 5% del precio final de venta ya que es habitual que haya una negociación, y este porcentaje es más alto o más bajo en función de si la agencia inmobiliaria lleva en exclusiva el inmueble o lo comparte con otras agencias. Ya hablaremos de ello en otro post más adelante.
En un alquiler funciona al revés, el propietario no paga nada, y nosotros ni siquiera le cobramos la redacción del contrato, mientras que el inquilino es el que paga todos los honorarios (el 10% de una anualidad en los contratos largos).
¿Significa entonces que en las ventas el propietario es mi cliente, y en los alquileres tengo que cuidar más los intereses del inquilino?
Podemos complicar más la ecuación, podemos tener un cliente con más de un piso en alquiler y querer nosotros aumentar nuestra cartera de pisos en alquiler, por lo que en este supuesto, podría llegar a defender los intereses del propietario. O suceder otro supuesto, que al ser todas las partes personas, incluso el intermediario más profesional podría llegar a tener más empatía por una de las partes. Hay cientos de combinaciones que me permitirían ser parcial y subjetivo.
Entonces, ¿qué hacemos?
Tener claro nuestro foco
Para hacer bien nuestro trabajo es muy importante tener claro quién es nuestro cliente y a quién nos debemos. Tener un objetivo claro es fundamental.
En el sector inmobiliario actúan 2 figuras con intereses opuestos, el propietario y el comprador. El primero quiere vender al precio más alto posible, mientras que el segundo quiere comprar al precio más bajo. ¿A quién nos debemos?
Lo fácil sería decir que todas las partes son igual de importantes, y verdaderamente lo son. Sin embargo, en cualquier operación de compraventa o de alquiler, en 080 Real Estate tenemos muy claro el objetivo que queremos satisfacer, LA OPERACIÓN. Así de ambiguo y así de claro. Nuestro foco es LA OPERACIÓN, sin personalismos, o con todos los personalismos.
Nuestro objetivo es que todas las operaciones salgan bien, sin problemas, sin sorpresas, sin fisuras cual plan trazado a la perfección que se lleva a la práctica con la precisión de un reloj suizo.
¿Les parece interesante este post? La semana que viene hablaremos de todos los elementos a tener en cuenta en una compraventa de un inmueble.
Durante los días previos a una firma, ya sea un contrato de arras, un alquiler, o una escritura ante notario, nuestra obsesión es que esté todo en orden el día D, y trabajamos conjuntamente con cada parte, vendedor, comprador o inquilino, los días anteriores al día D para que no haya ningún imprevisto.
¿Cuándo salen satisfechos vendedor, comprador, propietario e inquilino?
Cuando la firma del contrato es rápida, amigable y sencilla, según lo previsto. Cuando se cumple el plan.
Cuando en una negociación sucede lo que habíamos anticipado, cuando ante cualquier circunstancia el profesional intermediario está preparado y aporta soluciones, cuando no falta ningún documento, cuando el intermediario no es protagonista, y cuando después de firmar lo celebramos con los clientes con un brindis, podemos decir que la operación ha sido un éxito.
¿Y la semana que viene?
Todas las semanas publicamos un post nuevo. La semana que viene hablaremos de los documentos necesarios y elementos a tener en cuenta en el momento de firmar la compraventa de una casa. Tanto por parte del comprador como del vendedor.